Día 9

Junio: Obediencia

Cada Hermana, al entrar en la vida religiosa, debería dejar su propia voluntad fuera de la puerta, para no tener otra voluntad que la de Dios. -San Francisco de Sales

San Dositeo dijo de sí mismo que desde su primera entrada en la vida religiosa renunció completamente a su propia voluntad, sometiéndola en todo a la de su Superior, a quien también revelaba todas sus tentaciones y todos sus deseos. Y añadió que de esta manera había alcanzado tal paz en su corazón y tranquilidad en su mente que nada podría perturbarlo.