La Dama de la Caridad, Jean-Baptiste Greuze

Día 16

Noviembre: Caridad

Vale la pena reflexionar que Dios, que nos ha mandado amar a nuestro prójimo, también ha prescrito la manera en que debemos amarlo, es decir, como a nosotros mismos. Esta es la regla que no se puede transgredir sin culpa; y es tan esencial que si nuestro amor no alcanza esta medida, no es suficiente.

San Wenceslao gastó gran parte de su riqueza en comprar a los hijos de padres paganos, a quienes después hizo educar en la fe católica.