San Felipe Neri, Sebastiano Conca
Día 2
Enero: Perfección
Debemos comenzar con una resolución firme y constante de entregarnos por completo a Dios, profesándole de manera tierna y amorosa, desde lo más profundo de nuestros corazones, que tenemos la intención de ser suyos sin reservas. Luego, debemos volver a renovar esta misma resolución con frecuencia. - San Francisco de Sales
Uno de los medios para la adquisición de la perfección que fue especialmente inculcado y practicado por San Felipe Neri fue la frecuente renovación de buenas resoluciones.
San Francisco de Sales realizaba de vez en cuando una renovación espiritual y siempre concebía en ella nuevos deseos de servir a Dios mejor.
San Juan Berchmans, desde el mismo momento de su ingreso a la vida religiosa, sembró en su corazón una fuerte resolución de llegar a ser un santo. No solo se mantuvo constante en todas las prácticas y resoluciones que tomó con ese fin, sino que día a día adquiría nueva fuerza para su beneficio espiritual.
Cuando un religioso santo estaba dando Ejercicios Espirituales en Torre di Specchi en Roma, una monja llamada Sor María Bonaventura, que llevaba una vida muy relajada, no quería estar presente. Después de muchas súplicas, finalmente accedió a asistir. La primera meditación, sobre el fin del hombre, encendió tal fervor en su corazón que apenas el Padre terminó, ella lo llamó y le dijo: "Padre, quiero ser una santa y rápidamente". Luego se retiró a su celda y, escribiendo las mismas palabras en un trozo de papel, lo fijó en el pie de su crucifijo. A partir de ese momento, se aplicó con tanta seriedad a la práctica de la perfección que, once meses después, se escribió un memorial de ella al fallecer
Un Mercedario