San Francisco de Asís, Murillo

Día 26

Marzo: Mortificación

El mayor regalo que uno puede recibir de Dios en este mundo es la sabiduría, el poder y la voluntad para conquistarse a sí mismo, negándose a sí mismo. - San Francisco de Asís

El abad Pastor tenía la más alta opinión de este ejercicio, y solía decir que nuestra propia voluntad es un muro de hierro que nos desune y nos separa de Dios.

Santa Colette, de la Orden de San Francisco, solía decir a menudo que pensaba que era una mayor mortificación negar el propio juicio y la propia voluntad que abandonar todas las riquezas del mundo, y por lo tanto lo practicaba al máximo de sus capacidades. San Bernardo también compartía los mismos sentimientos, y decía que todos los males brotan de una única raíz, que es la propia voluntad.

Un Mercedario