Venerable Ángela de Foligno, Desconocido

Día 7

Abril: Paciencia

Una onza de la Cruz vale más que un millón de libras de oración. Un día de crucifixión vale más que cien años de todos los demás ejercicios. Vale más permanecer un momento en la Cruz que saborear las delicias del Paraíso. - Venerable Hermana María Vittoria Angelini

Santa Brígida una vez recibió y soportó pacientemente una sucesión de pruebas de varias personas. Una de ellas le hizo un comentario insultante; otro la alabó en su presencia, pero se quejó de ella en su ausencia; otro la calumnió; otro habló mal de un siervo de Dios en su presencia, causándole gran disgusto; uno le hizo un grave daño, y ella lo bendijo; uno le causó una pérdida, y ella oró por él; y un séptimo le dio información falsa sobre la muerte de su hijo, lo cual recibió con tranquilidad y resignación. Después de todo esto, Santa Inés la Mártir se le apareció, trayendo en su mano una corona muy hermosa adornada con siete piedras preciosas, diciéndole que habían sido colocadas allí por estas siete personas. Luego se la puso en la cabeza y desapareció. ¿Cómo se podría haber ganado tanto por cualquier otro ejercicio?

La Bienaventurada Ángela de Foligno, cuando le preguntaron cómo podía recibir y soportar los sufrimientos con tanta alegría, respondió: "Créanme, la grandeza y el valor de los sufrimientos no nos son conocidos. Porque, si supiéramos el valor de nuestras pruebas, se convertirían para nosotros en objetos de saqueo, y andaríamos tratando de arrebatar entre nosotros oportunidades para sufrir".

Un Mercedario