Día 15

Abril: Paciencia

Es cierto que el verdadero espíritu está más inclinado a las aflicciones, la aridez, el disgusto y las pruebas que a las comunicaciones dulces y placenteras; pues sabe que lo primero es seguir a Cristo y negarse a sí mismo, tal como tanto inculcaba el Señor. - San Juan de la Cruz

El Señor se apareció a Santa Catalina con dos coronas en sus manos, una de oro y la otra de espinas, y le dijo que eligiera la que prefiriera. Ella eligió la segunda. Desde ese momento, concibió un gran amor por las aflicciones y las pruebas, y dijo: "Nada me consuela tanto ni me da tanto confort como las aflicciones y cruces, y me parece que si no tuviera este apoyo de vez en cuando, llevaría la vida más miserable del mundo; y si Dios me diera a elegir entre ir ahora al Paraíso o quedarme un poco más aquí para sufrir, elegiría lo último en lugar de lo primero, porque sé cuánta gloria se incrementa por medio del sufrimiento".

La bendita María d'Ognes solía dormir con el suelo como cama, una piedra como almohada y un cilicio como manta. Un día, siendo probada más allá de medida por los dolores de la parálisis, emitió suspiros tan dolorosos que un hombre santo rezó a Dios por ella, y fue aliviada de su enfermedad. Pero cuando se dio cuenta de la cura, mandó a pedir al santo que no rezara más por ella, diciendo que valoraba la enfermedad mucho más que la salud.

Un Mercedario