San Francisco de Sales, Desconocido

Día 19

Diciembre: Unión

¿Cuándo nos pondremos completamente en manos de la voluntad de Dios, sometiendo sin reserva nuestra voluntad y todos nuestros afectos a Su dominio? Entonces nuestras almas estarán tan unidas a Dios que podremos decir, como aquellos cristianos muy perfectos: "Yo no vivo en mí, sino que es Jesucristo el que vive en mí." San Francisco de Sales.

Este santo, muchos años antes de su muerte, no quería, no amaba, ni deseaba más que a Dios en todas las cosas. Decía: "Nada hay en el mundo que pueda satisfacerme; solo Dios puede contentarme." Otras veces exclamaba, absorto en Dios: "Señor, ¿qué hay en el cielo y qué quiero en la tierra sino a vos? Vos sois mi porción, mi patrimonio por toda la eternidad."

Oración final

Dios mío, sólo tú puedes satisfacerme, me complazco en todo lo que proviene de ti.

Abad Lasausse